"Quien tenga algo que objetar acerca de lo que yo escribo, sólo piense y recuerde que: Lo que expongo, es mi experiencia y mi pensamiento; no puedo exponer ni su experiencia ni su pensamiento. Si mi experiencia fuese igual que su experiencia y mi pensamiento fuese igual que su pensamiento, entonces usted sería yo... y de ello, a ambos nos libre Dios."
(José L. Dasilva N., manifiesto personal, xxxx)
"El comunismo no priva a nadie del poder de apropiarse productos sociales; lo único que no admite es el poder de usurpar, por medio de esta apropiación, el trabajo ajeno."
(Marx y Engels, Manifiesto Comunista, 1848)

domingo, 30 de agosto de 2020

Epílogo


Posuida dun meigallo
a lua, pandereteira,
con ritmo de muiñeira
baila sobre dun carballo

¡Ai miña lua de maio!
miña lua feiticeira
que vas deixando na leira
beixos e alalás de orballo

¿dime ti que ibas conmigo
onde deixei esquecidos
aqueles soños que foran
semente das miñas loitas
alento do meu traballo? ...


(y ya no sé)
acaso también yo sea un recuerdo
(entre los tantos que galopan mis neuronas)

sábado, 29 de agosto de 2020

¡Adios!



Silandeiro polos montes
preto de Vilagarcía
vou lembrando a Rosalía
--------------"Adios ríos, adios fontes"

As follas novas corean...
--------------"Adios regatos pequenos"
i ó son do meu pensamento
un salaio engade o vento

--------------"non sei cando nos veremos"


viernes, 28 de agosto de 2020

Cual Quijote por tierras de Castilla

Cual Quijote por tierras de Castilla
pluma en ristre apoyada como lanza
en lugar de Dulcinea fue poesía
yo... decir a quien pregunte no sabría
si Quijano, Rocinante o Sancho Panza
mas lo cierto es que después de tanta andanza
con tan grata, entrañable, compañía
una alarma se dispara en lontananza
se detiene el galopar bajo mi silla
miro al frente y aquella pared blanca
me devuelve a la verdad de cada día
nos cruzamos a través de una ventana
que encerraba en su cristal mil maravillas
pero un mundo más real
(por inmediato) hoy me reclama
y no deja, a mi elección, alternativa.

jueves, 27 de agosto de 2020

Si notas que algo se mueve...


Si notas que algo se mueve a tu alrededor
--------y no hay viento ni brisa
Si descubres que en tu rostro se dibuja
--------sin motivo una sonrisa
Si sientes que algún deseo indiscreto
--------suavemente se desliza
llenando el pequeño espacio
que hay entre piel y camisa...

tal vez sea que a tu lado
muy cerca de ti
muy cerca
más cerca aún que tu piel
más cerca aún que tu propio pensamiento
--------(más cerca aún de lo más cerca de ti
-------- que puedes ir con tus manos)
latiendo va el sentimiento
de alguien que no te olvida

a pesar de la distancia
--------(y más allá de la distancia)
a pesar del tanto tiempo
--------(y más allá de cualquier tiempo)
a pesar de su silencio
--------(y añorándote en silencio)
hay alguien cerca de ti
muy cerca
que te piensa y te desea
que te quiere y no te olvida.

No lo ves pero está en ti.
tal vez sobre ti.
Muy cerca.

Donde duerme la ternura
Donde despiertan los besos

--------Donde la tela se hunde
--------cuando se ajusta
--------sobre tu cuerpo...

Donde el instinto conduce
nuestros labios en procura
del alimento primero

Donde el placer marca el rumbo

donde comienza la vida
donde se aquieta el deseo

--------(origen mismo
--------de mis angustias
--------motivo cierto
--------de mis desvelos)

confluyen tus sensaciones
se alimentan mis excesos.

Está en ti.
No puedes verlo.

Te acompaña. Va contigo.
Lo sepas o no lo sepas
queriéndolo o sin quererlo.

Perdóname si es que acaso
creo más de lo que debo
me dejo llevar a ratos
por ilusiones y sueños...
cuando digo lo que digo
es que lo que digo quiero
aunque al tiempo que lo digo
no sé si también lo creo.

Estaré o no estaré.
Puede ser. Puede no serlo.
Prefiero creer que sí
motivos bastantes tengo
bastantes muestras me has dado
de que entre tu vida y mi vida
no hay distancias ni tiempos
-como dijera el cantor-
porque el amor es sincero.

miércoles, 26 de agosto de 2020

Nuestros ojos sólo dicen aquello que la luz les cuenta... Y pocas veces la luz lo cuenta todo.

martes, 25 de agosto de 2020

No lamento no haber podido...

No lamento no haber podido bajar la luna para ponerla a tus pies. Al fin y al cabo, aunque pudiese y lo hiciera, ¿de qué te serviría pisotear la luna?

No lamento no haber podido hacerte un collar de estrellas ensartadas en hilos extraídos del sol. ¿En dónde te lo pondrías?

Lo que sí lamento, y créeme que lo siento, es no haber ocupado en regalarte más y mejores sonrisas, todo ese tiempo invertido en el absurdo intento de buscar para ti lo imposible.

lunes, 24 de agosto de 2020

Pongo tu nombre al papel...

Pongo tu nombre al papel como tantas otras veces y, como tantas otras veces, el papel me regala una sonrisa; me mira con tus ojos.
Como tantas otras veces, escribo para decir lo que mi voz se calla...
aquello que quizás tú nunca escuches...
aquello que tal vez nunca te diga.



La imagen que en tus ojos se refleja,
mujer, cuando me miras
tiene un algo que conozco;
se me hace familiar pero es distinta
a la imagen que el espejo me devuelve...
El espejo la devuelve tal cual es
tus ojos la reflejan corregida,
retocada por el mágico pincel
del artista que dibuja en tus pupilas.
No soy yo quien en tus ojos se refleja,
mujer, cada vez que tú me miras.
No soy yo.
Es aquel que yo quisiera ser.
Es aquel que nunca fui y no seré,
aunque creas que es a mi, mujer,
a quien ves cuando me miras.

domingo, 23 de agosto de 2020

Allá se aleja el anzuelo...

Sales a la calle y caminas con la sensación de que todos a tu alrededor te están mirando. A tu paso oyes murmullos que ni siquiera alcanzas a comprender y sientes que todo cuanto te rodea está gritando tu nombre...
Si sólo por un momento bajaras del pedestal en que por cuenta propia te has subido, te darías cuenta de que no son sino tus ojos los que te miran... ¡si hasta los sonidos que oyes tienen tu misma voz!.

Allá se aleja el anzuelo.
No lleva nombre ni invitación
no dice trucha o salmón
no dice bagre o sardina...

Cuando se lanza el anzuelo
lo más que cabe esperar es que pique un pez...
-------------------------------(si es que algo pica)
y, cuando pica
¿de quién es la culpa?
¿del anzuelo?
¿de quien lo lanza?
¿acaso, de la carnada?
¿o acaso del propio pez
que no ha sabido, en su estupidez
tener la boca cerrada?

sábado, 22 de agosto de 2020

Fiesta Brava

Un torero por león...
un toro por un cristiano...
Esto es civilización
aquello "circo romano"...
Qué poco cambian algunas cosas!

viernes, 21 de agosto de 2020

Una tarde hacia San Juan

La soledad
es una plaga
persistente
que viene y va
como esas hierbas
que tanto afean
el jardín ...


Una tarde hacia San Juan
me encontré con las estrellas.
Me miraron temerosas...
¡Cuán efímera es la luz de la existencia!

Una noche de San Juan
(la noche en que todas juntas
se encendían mil hogueras)
una a una se apagaron
una a una las estrellas

Ya no hay tarde que camine hacia San Juan.

Ya no hay noche de San Juan.
Sólo una noche de junio...
una noche de recuerdos
como otra noche cualquiera.

jueves, 20 de agosto de 2020

Resucitar en la tierra

Resucitar en la tierra
para morir en el cielo...
Muerto
--------una
------------dos
------tres veces muerto...
---------y muchas más-
y otras tantas revivido
-----si se quiere redimido-
por efectos del recuerdo...

(de una carta a Salvador Vanegas)

En silencio.
Sigo andando. En silencio.
Sin hacer mucho ruido.
Peregrino.
Absorto en mi fe y en mis creencias
hacia no sé qué templo
de no sé qué ser Divino.
Algunas veces a tientas, las más
a tropezones con las piedras del camino;
pero, en todo caso, sigo andando
siempre andando
porque el movimiento calma mi impaciencia
y al andar desapararece la sensación de estar perdido

... Así es que hago silencio...
escucho
intento aprender de lo que oigo
-tambien de lo que veo-
y sigo andando a mi ritmo
si no en silencio total
sin hacer mucho ruido.

La vida como el deporte:
un error al final del juego
-------------tres en base
------------------------lanzas la bola
------------------------------------home run-
y te gana el otro equipo.

Siempre habrá una próxima temporada.

miércoles, 19 de agosto de 2020

A veces un viento fuerte

"Descubrí que mi poesía es hermafrodita, como mi locura, la expedición espontanea de un sentimiento rebelde, que emigra al papel através de mi pluma, para amarse con corazones ajenos, caer en el olvido, viajar con los recuerdos o vivir eternamente en sus almas. Y siento tanta locura como poesías para regalar"
(Marcelo Moscaritolo)


(A Marcelo Adrián Moscaritolo)

A veces un viento fuerte sopla
y no puede mover uno sólo de nuestros cabellos...

A veces, viene una brisa
suavemente se desliza
por un resquicio pequeño
y se estremece hasta el sueño
que no creimos soñar
A veces viene un cantar
que pasa sin dejar huella
a veces viene una estrella
que sin ruido, apagada
explota desde la nada
y entre nosotros se queda...

Allí donde está el amigo
está el calor del estío
está la luz, está el río
que riega los maizales
del alma en su soledad

está el compañero cierto
con su portal siempre abierto
por si precisas entrar

la mesa siempre dispuesta
y a punto para cenar.

martes, 18 de agosto de 2020

Mucho anduve en solitario


Mucho anduve en solitario
que es un andar por andar
un estar en todas partes
y, al tiempo, en ningún lugar

Mucho anduve en solitario
buscando
lo que mientras solo anduve
no supe donde buscar

Mucho anduve en solitario
hoy que tengo compañía
¡Ya no quiero soledad!

lunes, 17 de agosto de 2020

Sobre aquella colina un hombre descansa


Sobre aquella colina un hombre descansa
pesan años de lucha
sobre su espalda ...

Sobre aquella colina un hombre espera
la traición va en camino
(la muerte que asciende)
por la ladera ...

Sobre aquella colina cantan las balas
réquiem por el guerrero
de grandes alas

jueves, 13 de agosto de 2020

Cuestión de "Oportunidad"

(abril/2003)

Acto I

        El 15 de abril de 1985, cerro arriba, a trescientos y tantos escalones de altitud sobre el nivel raso de la ciudad, en un recinto remotamente parecido a algo que pudiera ser una vivienda, nació una niña cuyo nombre no diremos; no por que no lo tenga -tener lo tiene, que la pobreza, aún la más extrema, no excluye al nombre como a veces hace con el apellido-, sino porque esta niña podría ser cualquier niña y, a los fines que persigo escribiendo esto, lo es. Hija de madre soltera y padre desconocido, de hembra en celo, hay quien diría, y macho que se aprovecha sin más conciencia que la ley natural, biológica, imperante en cualquier selva; producto de las circunstancias, acaso de la inocencia. Desde el mismo instante de su nacimiento supo lo que era el hambre; y, al poco de caminar conoció el trabajo duro y constante. Cuando tuvo edad de ir a la escuela, era mujer de su casa: cuidaba de dos hermanos, niños de menor edad, hijos tal como ella de padre desconocido, mientras su madre -típica hembra en ambiente de miseria- ganaba en casa de lujo el poco pan de la cena. De cualquier modo, ¿para qué ir a la escuela? Nada se aprende con hambre como no sea a distinguir los gruñidos del propio estómago. No se puede estudiar con hambre; tampoco sin libros... Y los libros son aún más costosos que el pan.

        Hoy, con 18 años cumplidos, se gana la vida para ella, su madre y sus hermanos -dignamente, eso sí- limpiando la basura en casa ajena, sin más perspectiva de futuro, ni más expectativa, que vivir mientras se pueda.

Acto II

        Aquel mismo día, 15 de abril de 1985, en una clínica privada de una zona más o menos céntrica de la ciudad -clase media, digamos solamente por poner cierta distancia, no para "separar" sino para producir el contraste necesario a la conclusión-, nació otra niña. Su padre aguardaba la noticia en el salón de espera, mientras leía, de un poemario de Andrés Eloy Blanco, aquel hermoso poema "los hijos infinitos"

("Cuando se tiene un hijo, se tiene al hijo de la casa y al de la calle entera, se tiene al que cabalga en el cuadril de la mendiga y al del coche que empuja la institutriz inglesa y al niño gringo que carga la criolla y al niño blanco que carga la negra y al niño indio que carga la india y al niño negro que carga la tierra.")

        Esta niña de la que ahora hablamos, creció al abrigo del cariño y los cuidados de sus padres, abuelos, tíos y demás familiares. No supo nunca de hambres o vestidos rotos y cuando anduvo descalza fue por capricho propio no por falta de zapatos. Asistió desde que tuvo edad a un colegio privado (aclaro: de pago) y entre estudios y juegos -como debería suceder con todos los niños del mundo- pasó su niñez sin mayores contratiempos ni amarguras.

        Hoy, felizmente a sus diez y ocho años, comienza el segundo año de carrera universitaria.

Acto III
(discusión)

        Cuando pienso en estas dos niñas y oigo cosas tales como que "nada hay escrito para el futuro del ser humano" porque "el futuro de cada-quien, cada-quien lo escribe a medida que vive su presente", me digo que hay algo que no encaja del todo en su sitio. ¿Será que la segunda niña, me pregunto, tuvo mejores maestros de redacción, gramática y ortografía que la primera cuando aún estaban en su limbo prenatal (o preconcepción, por ir más atrás)? ¿Realmente fueron ellas quienes escogieron los padres que habrían de concebirlas? ¿Fueron ellas quienes escogieron el lugar donde iban a nacer? ¿qué culpas tuvo la una que la otra no tuviera? ¿Qué méritos?.

        Hay quien se esconde tras la idea de que "la oportunidad toca todos los días a la puerta, quien no la aprovecha es porque no quiere" para no ver -como recurso para evitar enfrentar- lo que sucede a su alrededor. Son aquellos que después de haber "levantado" una empresa exitosa, a costa de no poco esfuerzo (reconozcámoslo), atribuyen su éxito exclusivamente al esfuerzo dedicado y olvidan que hace años alguien tuvo en ellos la confianza suficiente -les dió la oportunidad- y puso a su disposición los recursos necesarios -financieros, intelectuales o del tipo que fuera- para comenzar. Es aquel que ha logrado acumular una cierta fortuna, gracias a su perseverancia y constante esfuerzo 18 horas al día durante 365 días al año y no pierde oportunidad para contarlo, orgulloso y ufano -con sobrada razón-, olvidando mencionar, por supuesto, el apoyo que desde algún despacho gubernamental -a cambio de un mínimo porcentaje y uno que otro obsequio por favores recibidos-, le vino en la forma de contratos o pagos anticipados. En fin, las variantes son tantas que sería imposible detallarlas todas -de harto conocidas que son, por otra parte, no tiene sentido detallarlas-.

        El caso es que -y no dudo que habrá quien me lo discuta-, muchas veces el éxito o el fracaso -dependiendo de lo que cada quien entienda por éxito y fracaso, pero en fin, el estar en donde se está- se reduce a una cuestión de oportunidades -estar en el lugar apropiado en el momento apropiado-. Es cierto que la oportunidad sin esfuerzo no lleva a ninguna parte; pero no lo es menos que el esfuerzo sin oportunidad, sólo nos lleva al cansancio; al desgaste físico y moral (que acaso, el último, sea el peor de los desgastes).

Abril, 2003

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miércoles, 12 de agosto de 2020

A Carmen, algunos años después...

...Y en sueños trocose
un día cualquiera
su largo camino
su vida primera
cuando en un suspiro
con paso cansino
por buscar su cielo
regresó a la tierra.


Así nos dejó
un día de abril
- recién entrada
la primavera -
los campos en flor
que fueran su vida
lloraron su marcha
gritaron su ausencia
y acaso rezaron
pidiendo clemencia
para quien no tuvo
más grande pecado
que amar demasiado
todo cuanto amó...

Y no es decir mucho
que amó en demasía...

de sonrisa fácil
siempre al llanto presta
que llanto y sonrisa
conjungan los tiempos
de un mismo sentir
vivió y desvivió
los sueños de todos
la risa de todos
fue su propia risa
con todos, el llanto
de todos, lloró
Quizas fue por eso
que al eco apagado
de su último adios
se unieron los robles
los pinos se unieron
el castaño al cielo
su voz elevó
con un grito amargo
que apenas audible
llegó a mis oidos
hirió mis sentidos
apagó mi voz.

Yo estaba tan lejos...
¡Ah! quien cerca estuviera...
yo nada sabía
de su sufrimiento...
de haberlo sabido...
¡No!, no habría sido
menos mi dolor.

Ahora le canto
(nunca antes lo hiciera)
Ahora quisiera
volver a sus brazos
posar mi cabeza
sobre aquel regazo
que en tiempos de infancia
tanto me acunó
que fue mi refugio
cuando tuve miedo
y cuando hubo frío
me dio su calor...

Ahora quisiera
abrazado a su espalda
dormir como otrora
el sueño tranquilo
de quien nada teme
ni al fantasma que vive
en clamores pasados
ni a futuros ocultos
tras cielos nublados...

Ahora quisiera...
pero este querer
anacrónico, a deshora
no tiene el poder
de volverla a la vida
no tiene más fuerza
que el calmo lamento
de un niño que llora
por su hada perdida
en los bosques del tiempo

se oye un suspiro
que rompe el silencio
se detiene la pluma
se apaga la voz
...

martes, 11 de agosto de 2020

A veces me pregunto...

A veces me pregunto qué hace más daño, si la palabra hiriente que, en un momento de ira, se nos escapa sin intención o aquellos rumores que oímos y damos por ciertos sin buscar confirmación.
Es curioso.
Convivimos a diario con una persona. Le oímos hablar. Le vemos actuar. Percibimos y sentimos el afecto con que nos trata. Nada que decir. Nada que juzgar o criticar. Ni un sólo motivo de duda. Ni la más mínima razón para la desconfianza.
Un buen -o mal- día alguien nos dice -de esa persona- que alguien le dijo que le dijeron que...
y nuestro criterio da un cambio radical... o, cuando menos, comenzamos a dudar.
¿Será que no creemos en nuestros propios sentidos?
¿Será que lo obvio -lo que está ahí, al alcance de nuestros ojos y nuestros oidos-, por ser obvio, claro y transparente -porque no se esconde- merece menos credibilidad que lo desconocido?


lunes, 10 de agosto de 2020

Notas

Qué tiempo tan corto el presente...
en cuanto tomas conciencia, ya es pasado.

Lo grandioso de ser uno más entre los muchos
es que nunca,
ni aún cuando más solos estamos,
sufrimos de soledad

¡Ah! Que la luz se vuelva eco de mis sombras.


domingo, 9 de agosto de 2020

La paz de las armas...

La paz de las armas es una guerra que duerme...

No hay guerra que traiga paz.
No hay paz que de una guerra se obtenga.

Las armas no cambian situaciones. Sólo sirven para determinar quien ejerce el control y mientras haya un sólo individuo que pretenda controlar la paz, cualquier apariencia de paz no será más que eso, una apariencia temporal.

Las palabras, sin embargo, van más allá; promueven cambios de actitud. Ciertamente los resultados son muy lentos pero lo logrado con palabras, mucho o poco (que algo siempre se logra), es real y permanente.
Un sólo inocente que caiga basta para invalidar la mejor de las intenciones

sábado, 8 de agosto de 2020

Dijo el poeta a la muerte...

... de pronto estos susurros se atrincheran
y otra vez la muerte
se vuelve a quedar quieta.
Abraham Zhinzhiyas

Dijo el poeta a la muerte

"llévame contigo
de una vez
en este día
de tal modo me tendrás
desde ya eternamente
para hacerte compañía."

Pero la muerte temió
(porque la muerte temía)
que la luz de aquel poeta
fuese a robar sus misterios
y trócandolas por tinta
utilizase sus sombras
para escribir poesía

"¡Ah! poeta irreverente

-así le dijo la muerte
con algo que, más que voz
un susurro parecía-

irreverente poeta
que la muerte no respeta
que vive sembrando vida
que la noche más oscura
aclara con luz de día

¡no tendré ya suficiente!
no me será ya bastante
con toda una eternidad
para sumarle más tiempo
al tiempo de soportarte
cuando no haya alternativa

¡nada más me faltaría!

quédate en tu claridad
no te metas en mi sombra
que tus palabras me asustan
más a mí que a ti la vida"

Y huyó de allí velozmente
(la muerte)
tan veloz como podía
no fuera que aquel poeta
sobre el negro de sus alas
sembrara un jardín de versos
convirtiendo en día eterno
lo que era noche infinita.

viernes, 7 de agosto de 2020

Siguen pasando los días...

Siguen pasando los días
La luz transporta tu imagen
en directo
de mis sueños al espejo
doy media vuelta y no estás
vuelvo a mirar
y aún te veo de lejos


Siguen pasando los días
noches
días
noches blancas

siguen sin tregua pasando

y aunque a mi paso tú pareces alejarte
y a tu paso no me siento yo más cerca
no hay espera más larga que mi esperanza
ni sueño que me impida ver la realidad.

jueves, 6 de agosto de 2020

Si Pudiera...

Si yo pudiera... Ah! si pudiera!
abriría la puerta que está a mis espaldas sin molestarme en cerrarla y correría hasta encontrar un lugar en esta costa soleada donde pudiera desprenderme (liberarme, más bien) de estas ropas que me amarran y nadar como un pez en medio de una fiesta de peces y gaviotas... y seguir nadando hasta que mis brazos dejaran de ser mis brazos y mis piernas no fueran ya más mis piernas y mi cuerpo no fuese más que agua dentro del agua, sol bajo el sol, brisa en el viento; dejando atrás odio, amor, sexo, guerra, paz para resumir cada uno y todos los sentimientos en una sóla sensación: SER. Pero no existe tal lugar a lo largo de esta costa que estuvo soleada ayer pero no lo está hoy; no puedo nadar como un pez (me hundiría facilmente) y no puedo escapar de estas paredes... Es necesario aprender a balancear el peso de lo que tenemos y de lo que queremos tener, de lo que somos y lo que queremos ser, distribuyéndolo entre ambas manos... digo, para no caminar inclinados hacia un costado.

miércoles, 5 de agosto de 2020

Prisionero


Siguen pasando los días
y yo te veo de lejos...

prisionero de las propias convicciones
encadenado a un esquema de moralidad
aquella ventana indica un rumbo
la puerta abierta un camino a tomar...

¡Son tan cortas las cadenas!
¡Tanto aprietan los grilletes!

¡Ah! quién pudiera escapar
desplegar las alas
volar
soltar el lastre del pensamiento
convertirse en humo
volverse viento
desvanecerse
ser sólo un eco que hace silencio
en el espacio volverse tiempo
y en el tiempo hora pasada
dar vuelta atrás a la nada
y volver a comenzar.

¡Ah! quién pudiera escapar
dejar atrás lo supuesto
olvidar lo conocido
abandonar lo adquirido
¡y volver a comenzar!

¿Qué hacer con todo el amor
cuando el amor se convierte en carga
que dobla tu espalda
y frena tus pies?

¿qué hacer?
¿atarlo a una piedra
al lado del camino
anclarlo en la ribera
dejarlo a su destino
echar a correr?

un breve sorbo de indiferencia
¡ah! si pudiera beber...

(¡y estos grilletes aprietan
con más fuerza cada vez!)

un breve sorbo, sólo una gota
que adormeciera por un instante
al cancerbero de esta conciencia
el tiempo justo de dar un paso
cerrar la puerta
y ya no volver.

¿dónde comienza el derecho?
¿dónde termina el deber?
¿Somos raíz o soporte?

¿Somos el sur de quien parte hacia el norte
o este y oeste a su paso y camino
deberíamos ser?

¿Dónde comienza el derecho?
¿dónde termina el deber?
¿Somos raíz o soporte?

¿acaso somos el norte
o el sur que a espaldas se deja
para nunca volver?

martes, 4 de agosto de 2020

Terquedad


Oidos que pueden oir y no oyen
Ojos que pueden ver y no ven
Instrumentos inútiles
Desperdicio de sentidos
¡Terquedad infinita! ¡Absoluta!
que no entiende de razones
no atiende a demostraciones
ni ante los hechos se inmuta
¡Absoluta terquedad! ¡infinita!

... guarecerse del buen tiempo
para luego dormir a la intemperie
cuando el viento arrecia
y la lluvia es más fría


lunes, 3 de agosto de 2020

Islas Inaccesibles


Nos hemos quedado sordos
de tanto escuchar los sonidos propios
nos hemos quedado mudos
de tanto hablar de nosotros mismos
nos hemos quedado ciegos
de tanto observar nuestra propia imagen.

ya nadie nos oye
porque a nadie oimos
ya nadie nos ve
porque a nadie vemos
Somos fantasmas
figuras sin sombra
cajas vacías
que a nadie importan
que nadie quiere
inútiles pensamientos
que nada aportan

La paz naufraga
el amor se hunde
en este arhipiélago
de islas inaccesibles.


domingo, 2 de agosto de 2020

El eco de la guerra


En Frecuencia Modulada
me llega el eco de la guerra
de esa realidad que no es mi realidad
y está presente como si lo fuera

y no es mi realidad por poca cosa
por mero azar
por no sé qué privilegio heredado aún antes de tener herencia
por algún salvoconducto que al nacer me dió el destino
no es mi realidad

no es mi realidad porque no corro
hacia el refugio al sonar de una sirena
porque no duelen mis huesos con la tortura ajena
porque nadie me obliga a dejar atrás mi casa
y buscar protección en otra tierra.

No. No es mi realidad, pero es mi guerra.

Me lo recuerda el diario
que acompaño con café cada mañana
me lo recuerda esa voz que me hace sentir menos solo
mientras conduzco las ruinas de lo que alguna vez fue un coche
(porque al menos tengo coche)
me lo recuerda el cristal de esa caja frente a mí a la hora de la cena
(porque al menos tengo cena)
y me voy a dormir
(puedo vanagloriarme de tener paredes, techo y cama)
con la idea de haber visto otra película...
una película más como tantas que ya he visto
pero en esta (a diferencia)
no hay superhéroes al estilo americano
(un sólo hombre acabando a la vez con cien villanos)
aquí no hay Swarzenegers ni Stallones
aquí no hay dobles, no se repiten escenas
el guión se improvisa día a día
para un elenco de actores que nunca obtendrán
el premio de la Academia.

Esto no es una película más
tampoco un juego de fútbol al que asisto en vivo y en directo
gracias a la ciencia de las telecomunicaciones.

Y al acostarme, miro al techo y rezo
rezo por los que han muerto ya
y por los vivos que quedan
y entonces me pregunto si rezar servirá de algo
¿rezará el piloto también antes de subir al avión?
¿rezará acaso antes de lanzar el misil?
¿rezará el que en tierra empuña un arma antes de disparar?
¿rezará también en algún momento del día quien ordena el ataque?
y aquel que tiene en sus manos el poder
para acabar con tanta muerte y sufrimiento inutil
¿acaso rezará tambien?
Sí. Probablemente también reza.
Puede que, incluso, con más fé que yo.
Así que nuevamente me pregunto
¿de qué nos sirve rezar?
y sigo rezando sin saber por qué
ya no por los muertos de ayer
o por los muertos de hoy
sino por los vivos que quedan
en esta realidad que no es mi realidad
pero es la guerra de todos.

(14/4/1999)

sábado, 1 de agosto de 2020

Se nos perdió el camino...


Los días pasan y pasan
y yo te veo de lejos

Se nos perdió el camino
de tanto buscar caminos nuevos.

Porque conjugar quisimos,
a una vez todos los tiempos
sin tiempo nos quedamos
                    (y sin verbos).

     Por andar, de anochecida,
     invocando amaneceres
     se nos escapó la noche
     y se llevó, con todo y sombras,
     medias luces y placeres.

Y ahora,
   (en este absurdo ahora inconsistente
     sin antes o después
          sin ayer
          sin hoy
     y acaso también, sin un mañana)
vivimos,
vagamos como perdidos en un sueño
flotando ingrávidos
más allá de la atmósfera del tiempo
sin saber como volver.

Es que habrá manera alguna de volver?

y al final,
          ¿Volver a dónde?
          ¿Volver a qué?

Los lugares que dejamos, hoy son otros
otra la gente, también, que nos aguarda
nosotros mismos ya no somos quienes fuimos
otras cargas doblan hoy nuestras espaldas.

Para bien o para mal hay un abismo
entre la tarde de ayer y esta mañana.

... Y no hay sendero que nos lleve hacia el pasado
a no ser que el propio tiempo dé la vuelta
o retorne, marcha atrás, sobre sus pasos
deshaciendo lo que nunca fue construido
abandonando todo sueño conquistado
despojándonos de todo lo aprendido
y borrando a cada paso los recuerdos
de aquello que ya fue sin haber sido.